Hola!
Bueno, lo prometido es deuda ¡así que aquí está!
Como os dije en la entrada anterior, no soy una gran aficionada a la repostería por varias razones:
-En primer lugar, porque me resulta un aspecto bastante complicado de la cocina, para el que se debe tener una gran técnica y que por lo tanto deja poco lugar a la improvisación.
-La segunda razón, vamos a ser claros, es que yo no soy precisamente "El As de las tartas". Digamos que en la mayoría de las tartas que he hecho no había encontrado la tarta "perfecta". Siempre me quedaba el bizcocho un poco seco, o la cobertura no me terminaba de convencer...